ante tu presencia,
proverbios encantados
disturban tu conciencia.
Abismos maternales
y miedos inventados,
cuestiones infernales
y días en blanco.
Abismos,
solo y solamente,
abismos
ya son más que suficiente.
Abismos que me enredan
abismos que te empujan
abismos que me queman
abismos que te llenan.
Abismos que saltan por los aires
y que rompen nuestras cadenas,
abismos que vuelan
lejos de toda condena.